A principios de este mes, el coleccionista de videojuegos Julian Turner, ciudadano de la localidad de Newman, Georgia, compró varios juegos de NES en un mercadillo. Una vez en casa, descubrió que dos de ellos, dos versiones PAL de Rollergames y Golf, ocultaban un contenido inesperado.
Turner percibió casi inmediatamente que los cartuchos pesaban más de lo normal, tras lo cual procedió a pesarlos con una báscula y comparar el resultado con otras copias de los mismos juegos que tenía ya en propiedad, confirmando, efectivamente, que pesaban un 50% más de lo que deberían. Al desmontar las tapas traseras de los cartuchos para comprobar de qué se trataba encontró dentro unas bolsas compactas de plástico metalizado, tras lo cual se puso inmediatamente en contacto con la policía.
Turner registró todo el proceso en el video que os mostramos a continuación:
Los agentes del departamento de policía, los cuales hacen aparición al final del video, revisaron el mercadillo en el que se habían comprado los juegos, pero se llegó a la conclusión de que no se trataba de una transacción de drogas reciente, y que los paquetes llevaban ya un tiempo dentro de los cartuchos. La policia no ha revelado a Turner la naturaleza de las drogas ocultas en los paquetes.
No es la primera vez que alguien encuentra un contenido inesperado. En su busca de información, el propio Julian se topó con la noticia de otro usuario que había encontrado una copia del juego Golf que ocultaba 5000 dólares en billetes de 100 del año 1985.
¿Explica esto la subida repentina de los juegos retro en el ámbito coleccionista? ¿Formaban estos juegos parte de la colección de José Tojeiro? ¿Se dispararán las ventas de los cartuchos de Golf de NES? ¿Rollerblade es un juego tan mediocre que solo se puede disfrutar si su uso va acompañado del abuso de sustancias? Tal vez nunca conozcamos las respuestas…
“Vine buscando cobre y encontré oro” esa me la apunto. Jajajajaja
LOL, y acompañada de una foto de Cristobal Colón gana en dramatismo