El grupo italiano de pirateria informática CPY anunció que finalmente ha conseguido descifrar Assassin’s Creed Origins, lo que significa que las personas con versiones ilegales del juego podrán pasar por alto sus protecciones DRM.
El anuncio de CPY apareció en el subreddit de CrackWatch, donde los comentaristas han estado especulando durante meses sobre si alguna vez sería posible pasar a través de la protección DRM. Esto fue después de la controversia inicial sobre la decisión de Ubisoft de incluir tantas capas de protección antipiratería debido a las quejas de los jugadores habituales de PC. La combinación de Denuvo 4.8, VMProtect y la seguridad Uplay estándar de Ubsisoft eran un gasto habitual en los recursos del sistema.
Los grupos de hackers normalmente se dan por vencidos en cuestión de semanas o incluso días tras la salida de un juego nuevo. A principios del año pasado, una serie de juegos tuvieron soluciones para su protección Denuvo en un tiempo récord, comenzando con Resident Evil 7. Sin embargo, Assassin’s Creed Orígenes logró mantener intactas sus diversas capas de protección durante mucho más tiempo, debido en parte a una versión más nueva de Denuvo que los juegos anteriores.
CPY, que a veces rompe juegos bajo el nombre de CONSPIR4CY, ha sido responsable de descifrar muchos de los juegos más importantes de los últimos años, incluidos Doom , Inside y Resident Evil 7. El lanzamiento de Denuvo 4.8, sin embargo, parecía una barrera casi imposible de traspasar. La Tierra Media: Shadow of War, South Park: The Fractured But Whole, FIFA 18, todos usaron una versión anterior de Denuvo y cada uno se logró piratear al día siguiente de su lanzamiento. No fue hasta finales de enero que la versión 4.8 se crackeó por primera vez con Sonic Forces. Aún así, Assassin’s Creed Origins todavía presentaba desafíos únicos debido a las protecciones añadidas de VRProtect y Uplay.
Ahora que los piratas pueden eludir las protecciones del juego, no está claro si Ubisoft mantendrá todas las tecnologías antimanipulación para sus próximos juegos. Ciertos editores han eliminado Denuvo de sus juegos después de que hayan sido descifrados, que es lo que sucedió con Doom e Inside, ya que habían logrado el objetivo principal de proteger el juego durante el tiempo de venta inicial. Durante tres meses, las protecciones antipiratería de Assassin’s Creed Origins, al parecer, han conseguido lograr algo similar.
El mes pasado, Denuvo fue comprado por la compañía de seguridad digital Irdeto y lanzó una versión 5.0 de su software. Dragon Ball FighterZ, lanzado el 26 de enero, es el juego más reciente para usar esta versión y no aún no se ha conseguido descifrar.
Pues me alegro muchísmo, y no por el pirateo, sino por ver si así las distribuidoras aprenden y ven que estas molestas protecciones DRM no sirven absolutamente para nada; solo sirven para jorobarnos a los usuarios legítimos. Cada vez que tengo que hacer malabares para poder jugar a mi copia perfectamente legítima de Forza Horizon 3, o al Battlefront II porque los servicios de autenticación tienen problemas, me hierve la sangre. Eso cuando estos sistemas no dejan directamente de tener soporte y el juego deja de funcionar, como cuando tuve que buscar un parche no oficial para poder jugar a mi copia de Resident Evil 5 que forzaba al uso del difunto Games for windows Live (la versión de Steam no permite el mod de juego a pantalla partida), o como cuando un amigo tuvo que buscarse la vida para poder instalar Far Cry 2. Eso cuando estas protecciones absurdas no generar agujeros de seguridad, como el odioso SecuROM que venía con Crysis, el cual la propia Microsoft recomienda parchear para evitar la ejecución de tan pernicioso programa.
Podrían tomar nota de GOG, que con su política de precios y sus juegos DRM free nos permite disfrutar, no solo de juegos pretéritos adaptados para funcionar en equipos modernos, sino de bombazos como The Witcher 3 o Hellblade: Shenua’s Sacrifice, sin que sus ventas se resientan lo más mínimo y sin jorobar al usuario.